Llevo todo el camino pensando en ti,
deseando de encontrarme contigo en el bar
y ahí estás,
mirándome
a un palmo de mi mano.
tengo un nudo en el estómago,
no sé como decírtelo
pero me tienes enamorado.
Con tus curvas perfectas,
tu boquilla gruesa,
el sudor de tu cuerpo
que hace que quiera beberte
y saborear el licor que encierras.
Perdona, ¿me hablas a mí?
No, a ella.